Seguro que alguna vez te ha pasado que de pronto dices o haces algo que te recuerda a tu padre o madre y además lo detestas. Además lo haces de forma automática, sin darte cuenta.
Pero cada vez eres más consciente de que no te gusta cierta reacción o ciertos pensamientos automáticos.
¿Te has preguntado por qué pasa esto?
En la tapa infantil, más o menos hasta los 7 años, somos como una grabadora donde registramos todo lo que sucede en nuestro entorno familiar.
Da igual si esos patrones son más o menos desadaptativos, el hecho es que aún no tenemos suficiente desarrollo madurativo como para adaptar o descartar algunos de ellos.
De esta forma, sin cuestionarlo e inconscientemente, es decir, sin darnos cuenta, interiorizamos nuestros modelos de referencia.
Un patrón tiene 3 elementos:
PENSAMIENTO: Los pensamientos que tenemos acerca de nuestro mundo y nuestras vivencias conforman nuestro sistema de CREENCIAS. Las creencias vienen dadas de pensamientos que al repetirse a lo largo del tiempo han cogido mucha fuerza.
EMOCIÓN: Pensamiento y emoción se retroalimentan. Cuanto más repetitivo sea un pensamiento más emociones se generarán al respecto y así reforzar más ese pensamiento.
ACCIÓN: La forma en la que pensamos y sentimos conlleva a como actuamos. A menudo de forma automática, porque tenemos ciertos pensamientos tan automatizados que actuamos de forma reactiva.
Puede que hasta ahora tus patrones te hayan servido para sobrevivir en tu entorno familiar, y que quizás estos mismos ahora te estén saboteando y no te identifiquen.
Es por eso que te animo a que revises tus patrones y los substituyas por aquellos que quieras incorporar en tu vida.
--> Cómo cambiar los patrones:
- Motivación para el cambio: Tener ganas de cambiar el patrón, y que es un proceso que requiere de constancia.
- Detectar el patrón: Se trata de una analítica introspectiva que puedes hacer tu o con la ayuda de un profesional.
- Consciencia: Para poder pasar a la acción es necesario ser consciente de lo que queremos cambiar. Detectar las creencias de ese patrón, las emociones y sus conductas.
- Liberar el patrón: Una vez has detectado el patrón disfuncional se trata de re adaptarlo por el que te resulte funcional. La herramienta que vamos a utilizar es lo que os he comentado:
PENSAMIENTO + EMOCIÓN = CONDUCTA
Se trata de adaptar ese patrón a través de los pensamientos que tienes acerca de él. Eso generará unas emociones que nos harán actuar concorde a lo que pensamos y por lo tanto, a lo que queremos. No obstante, antes tenemos que liberarnos de esas creencias enquistadas e inconscientes que conllevan cargas emocionales difíciles de cambiar si no las identificamos..
Es bueno pedir ayuda profesional para identificar más rápidamente esos patrones que ya no se adaptan a tu manera de ser ni a quién quieres llegar a ser. Trabajar los pensamientos adaptativos, las emociones gratificantes para poder así pasar a la ACCIÓN.
¡Si estás motivad@ escríbeme!
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